El model de creixement insostenible i il·limitat que ens ha abocat a la crisi econòmica mundial és també la causa de la crisi ambiental en la que estem immersos. Aquest és un model antieconòmic perquè ha deixat ja de ser positiu per a nosaltres.
Els beneficis que d’ell n’obtenim no superen el perjudicis que ens comporta en forma de pèrdua irreversible d’espècies i de recursos naturals, de contaminació i degradació ecològica, de costos personals i de injustícia social.
¿Es posible imaginar la Tierra sin gorilas, tigres, elefantes, rinocerontes,
osos, guepardos, búfalos...? ¿Un futuro cercano en el que tuviéramos
que mostrar vídeos de leones a escolares como quién enseña maquetas de
dinosaurios? Parece un escenario inimaginable, pero un grupo de especialistas alerta en un estudio de que no solo es probable, sino posible, a este ritmo de degradación de los ecosistemas y la biodiversidad.
"Los humanos han sido una fuerza motriz responsable de un proceso
sostenido de extinciones y declives en la abundancia de numerosas
especies de animales"
Históricamente, "los humanos han sido una fuerza motriz responsable
de un proceso sostenido de extinciones y declives en la abundancia de
numerosas especies de animales", escriben en su artículo los más de 40
expertos que lo firman conjuntamente. Y esta fuerza está arrasando como nunca.
Sus cálculos son muy alarmantes: en el siglo XXII podría no quedar ni
uno de los considerados grandes mamíferos. Ni los emblemáticos como el
oso polar ni los más desconocidos como el órix cimitarra, que ya está a
punto de extinguirse.
Sus datos son suficientemente expresivos: en la actualidad, el 59% de
los grandes carnívoros (aquellos de más de 15 kilos) están oficialmente
amenazados de extinción. Y lo mismo sucede con el 60% de los grandes
herbívoros (los de más de 100 kilos). Y aunque se han hecho importantes
esfuerzos para salvar a algunos de estos animales, como con los grandes carnívoros europeos,
no serían más que parches a juzgar por la alarma con la que importantes
expertos en biodiversidad describen la situación. El riesgo es
particularmente crítico en África Subsahariana y el sudeste asiático.
Los datos son suficientemente expresivos: en la
actualidad, el 59% de los grandes carnívoros están oficialmente
amenazados de extinción. Y lo mismo sucede con el 60% de los grandes
herbívoros
El problema va más allá de la desaparición de un animal bonito o emblemático.
Cada vez hay más ciencia que muestra el papel de estos grandes
mamíferos como especies clave en sus entornos, de los que depende un
equilibrio muy delicado. Son "ingenieros de ecosistemas", dicen, capaces
de regular efectos en cascada en la biodiversidad que los rodea.
Además, prestan servicios económicos y sociales fundamentales en las comunidades que los tienen cerca.
Los científicos explican que hay varios factores que están acabando
con la megafauna, que por sus características suele estar más expuesta a
la desaparición. "Los mamíferos de gran porte son extremadamente
vulnerables a tales amenazas debido a sus requerimientos de áreas
extensas para mantener poblaciones viables, sus bajas densidades
(especialmente en el caso de los carnívoros) y en general por poseer
rasgos de historia de vida típicos de especies ecológicamente
catalogadas como lentas", escriben.
"Los mamíferos de gran porte son extremadamente vulnerables debido a
sus requerimientos de áreas extensas, sus bajas densidades
(especialmente en el caso de los carnívoros) y en general por poseer
rasgos de historia de vida típicos de especies lentas"
En algunos casos, como los leones, la amenaza es la reducción drástica de sus territorios
y la presión de la frontera agrícola. En otros, la culpa es la
deforestación de sus hábitats. Los elefantes son el mejor ejemplo de
animales amenazados por una caza furtiva que solo quiere comerciar con
sus marfiles. Otra amenaza es la desmesurada expansión ganadera: por
cada gran herbívoro salvaje que encontremos en el planeta, hay 400
cabezas de ganado rumiante. En su estudio, que publica BioScience y que viene respaldado por Wildlife Conservation Society,
los científicos aseguran que tienen la responsabilidad colectiva de
alertar al planeta y de proponer soluciones a las sociedades y sus
gobiernos. Aseguran que no se resignan a limitarse a escribir el
epitafio de estos animales, como ya han tenido que hacer con el rinoceronte blanco del norte, por ejemplo.
Por ello, cierran su artículo con una declaración de trece puntos, en
los que reclaman reconocer la amenaza, entender que se van a extinguir y
apreciar la gravedad del asunto. Además, señalan que salvarlos no es
incompatible con el desarrollo humano, por lo que exigen aumentar los
esfuerzos institucionales, el apoyo de los gobiernos, mejorar el marco
normativo y los mecanismos financieros para salvar de la desaparición de
estos animales. Y acaban recordando "la obligación moral colectiva de
proteger la megafauna de la Tierra".
Jordi Roca Jusmet Catedrático de Economía de la Universidad de Barcelona (UB)
El 14 de julio, el Ayuntamiento de Barcelona presentó una ambiciosa
estrategia energética. El primer punto del comunicado de prensa hablaba
de “transición hacia la soberanía energética”. Soberanía se entiende
habitualmente como opuesto a dependencia. En el caso de la energía
podemos hablar, como mínimo, de tres aspectos de dependencia.
El primer aspecto es la dependencia respecto a recursos que proceden
del exterior. En este sentido, la dependencia de la ciudad de Barcelona
es prácticamente total. Si ampliamos el marco territorial de referencia
hacia el área Metropolitana de Barcelona o incluso hacia toda Cataluña,
el uso de recursos locales aumenta algo pero sigue siendo muy pequeño.
Encontramos más instalaciones de transformación energética (como por
ejemplo refinerías o centrales térmicas) pero los recursos primarios
-petróleo, gas natural o uranio- proceden del exterior de forma
totalmente mayoritaria. Si nos fijamos en el sector eléctrico, Cataluña
es uno de los países más nuclearizados del mundo: más de la mitad de la
producción eléctrica proviene de la fisión del uranio, un recurso
importado por mucho que las estadísticas oficiales se empeñen en incluir
la energía nuclear dentro de las fuentes propias cuando calculan el
grado de autoabastecimiento energético.
Un segundo aspecto es la absoluta dependencia respecto a unas grandes
compañías energéticas. En el caso de la electricidad, el llamado
oligopolio eléctrico (con Endesa, Iberdrola y Gas Natural como elementos
más destacados) domina totalmente el mercado catalán y español, tanto
en la generación y en la comercialización como, casi al 100%, en la
distribución, un monopolio natural concedido a empresas privadas en
prácticamente todo el territorio. El papel de entidades alternativas que
defienden otro modelo energético, limpio y descentralizado, como es el
caso de la cooperativa Som Energia es muy positivo pero todavía es marginal y se encuentra con dificultades en un contexto regulador muy desfavorable.
Un tercer aspecto de dependencia, que liga mucho con el anterior, es
el de la ciudadanía respecto a la provisión externa de energía. No
obstante, cada vez se abren más posibilidades para que las familias y
pequeñas empresas, individualmente o cooperativamente, generen la propia
energía con un modelo descentralizado de producción-consumo, la
expresión más clara del cual es la generación de energía fotovoltaica en
los edificios. Lo ideal no son unidades totalmente aisladas sino
interconectadas en red, y que en algunos momentos aboquen energía al
exterior y en otros la absorban. Lamentablemente el actual marco legal
español pone muchas trabas al desarrollo de este modelo de “generación
distribuida”.Avanzar hacia un modelo que desarrolle las fuentes propias y limpias
no sólo nos haría más independientes (la dependencia o independencia es
siempre una cuestión de grado) en todos estos sentidos con sus ventajas
económicas y sociales, sino que también tendría otra consecuencia tanto o
más importante: reduciríamos las amenazas ambientales sobre el conjunto
de la humanidad disminuyendo las emisiones de gases de efecto
invernadero y el injustificable legado de residuos radiactivos que en
algunos casos mantienen su peligrosidad durante miles de años. Tenemos
que evitar que la vida de otras poblaciones y el futuro de nuestros
descendientes dependan negativamente de nuestras decisiones
irresponsables.Las dificultades para cambiar el modelo energético son enormes y, en
este contexto, la decisión del Ayuntamiento de Barcelona de contribuir a
esta tarea a nivel de la ciudad y extendiéndolo a nivel metropolitano
es una noticia excelente. La hoja de ruta municipal no pasa solo por
invertir en energías renovables en edificios e instalaciones públicos,
sino también por empoderar a la ciudadanía para reducir su dependencia
respecto al oligopolio eléctrico, con el ahorro energético, la
eficiencia y la inversión en energías renovables y pudiendo optar por
ser clientes de una nueva comercializadora eléctrica pública al servicio
de un nuevo modelo energético que se prevé que esté operativa antes de
acabar el actual mandato.
Hoy en día sólo el Banco Central Europeo puede imprimir billetes. La banca crea dinero sólo cuando piensa que es rentable prestarlo, prefiriendo invertirlo en especulaciones inmobiliarias etc. mientras que muestra poco interés en estimular la economía real. Positive Money es un movimiento británico que ha resucitado una propuesta de reforma monetaria de la década 1930, denominada como Chicago Plan. Esta es su propuesta.
Tienes dinero gracias a alguien que se ha endeudado. Todo el mundo dirá que no se acuerda de haberle obligado a pedir préstamos, por eso vamos a ver cómo nace el dinero.
Una cosa que distingue el dinero de cualquier otro producto y/o servicio es que tú no puedes crear dinero y ponerlo en circulación. Puedes cultivar verduras para comerlas si tienes huertas, puedes coser ropas para vestirte si sabes hacerlo y puedes diseñar tu propia página web si lo sabes, pero no puedes imprimir billetes de 5, 10, 20 ó 50 euros y gastarlo porque es un delito. Hoy en día sólo el Banco Central Europeo puede imprimir estos billetes y emitirlos a través de otras entidades financieras cuando le piden efectivo con tal de que no sólo devuelva el principal sino también las tasas de interés.
Pero hoy en día la mayoría del dinero está creado y existe como saldos positivos en las cuentas bancarias. Cuando Jorge solicita al banco el préstamo de 150.000 euros para comprarse una casa y se aprueba este pedido, lo que hace esta institución financiera no es sacar efectivos de 150.000 euros desde el cofre y entregárselo al prestatario, sino teclear esta cifra a su cuenta bancaria y así nace el dinero. Jorge le paga al inmobiliario, el inmobiliario les paga a sus proveedores etc. por transferencia bancaria, y no hay necesidad de efectivo. En Reino Unido, donde este proceso de creación monetaria por la banca privada está ya en un estado avanzado, el propio Banco de Inglaterra admite el hecho de que el 97,4% de la libra esterlina está creada como dinero bancario (véase abajo). Vamos a ver lo que significa este hecho en un ejemplo.
Supongamos una comunidad de seis personas (Ana, Bruno, Cristina, David, Elena y Fernando). El 01 de enero de 2016, Ana y Bruno toman un préstamo de 100 € con tasas de interés de 5% por un año respectivamente y empieza a circular el dinero entre los seis para intercambiar bienes y servicios. A finales de 2016, las seis personas tienen los siguientes valores:
COMUNIDAD
Ana
Bruno
Cristina
David
Elena
Fernando
Total
Saldo
110
60
10
5
15
0
200
Deuda
105
105
0
0
0
0
210
En este caso, Ana puede pagar su deuda mientras que Bruno no lo puede, y aunque todos los demás sean tan solidarios como para darle todo el dinero (35€) a Bruno, le falta 10€ y su bancarrota sería inevitable. Pero el 31 de diciembre de 2016 Cristina y David consiguen préstamos de 200€ respectivamente y le pagan a Bruno para que pueda cancelar su deuda. A finales de 2017, los seis tienen los siguientes saldos:
COMUNIDAD
Ana
Bruno
Cristina
David
Elena
Fernando
Total
Saldo
5
5
60
50
10
250
380
Deuda
0
0
210
210
0
0
420
En este caso, ni Cristina ni David puede pagar la deuda porque Fernando retiene la mayoría del dinero. Si él se pone solidario, todavía es posible salvar a uno de ellos, pero obviamente es imposible que ambos cancelen su deuda porque falta 40€. De esta anécdota, podemos decir lo siguiente:
El dinero se pone en circulación exclusivamente como crédito bancario = deuda: Tienes dinero porque se ha endeudado alguien (tus clientes / vecinos / empresas locales / ayuntamientos / gobiernos autonómicos o el estatal…)
La única solución para posponer la bancarrota es inyectar aún más créditos
La acumulación del dinero puede impedir que los prestatarios devuelvan dinero
Además, la banca crea dinero sólo cuando piensa que es rentable prestarlo, prefiriendo invertirlo en especulaciones inmobiliarias etc. mientras que muestra poco interés en estimular la economía real.
Propuesta de Positive Money
Es en este contexto que ha nacido Positive Money , un movimiento británico que ha resucitado una propuesta de reforma monetaria de la década 1930, denominada como Chicago Plan. Sus tres propuestas son:
Arrebatar a la banca el poder de la creación de dinero para convertirlo en un proceso democrático, transparente y que rinde cuentas
Dinero creado libre de deuda
Que el dinero llegue a la economía real antes que a los mercados financieros y a las burbujas inmobiliarias
Vídeo: 3 simples cambios para refundar nuestro sistema monetario actual
Se podrá aprovechar este nuevo dinero para cancelar las deudas existentes sin volver a endeudar a nadie. Será un sistema monetario más sostenible porque hay menos riesgos de insolvencia. Mientras que hoy en día la gente está reacia a gastar dinero en esta economía con dinero escaso, se cambiará su comportamiento radicalmente con este dinero afluente, y también se mejorarán los servicios públicos gracias a la disponibilidad de más presupuestos. Quizá el gobierno llegue a reducir impuestos porque sobra el ingreso.
A menudo se rechaza esta propuesta por el miedo a la hiperinflación. Es fundamental obligar que el nuevo mecanismo de la creación monetaria (quizá por el banco central o por un nuevo comité monetario) monitoree también los precios: que inyecte más cuando bajan precios e inyecte menos cuando suben.
Impactos globales
Hoy en día existen diferentes corrientes interesantes que apoyan esta propuesta:
American Monetary Institute : fue fundado por Stephen Zarlenga, autor de un largo libro “The Lost Science of Money” y organiza conferencias anuales en Chicago, además de hablar con diputados y/o senadores en Washington D.C.
Fondo Monetario Internacional: dos investigadores (Jaromir Benes y Michael Kumhof) publicaron unestudio favorable a Chicago Plan y en 2016 abrió una página “La verdad sobre Bancos” para señalar la verdadera naturaleza de la creación monetaria.
Banco de Inglaterra: publicó boletines en 2014 (1 / 2 ) donde admitió que el 97,4 % de la libra esterlina está creada por la banca privada y que ni siquiera este banco central está controlando la masa monetaria. Después le invitó a Kumhof como “Serior Research Advisor”.
22 de julio de 2016 -. El miércoles se publicó la propuesta de reparto por país de la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero de la Unión Europea para sectores difusos
(transporte, edificios, agricultura y residuos). El objetivo común de
la UE es reducir un 30% de sus emisiones sobre las que tenía en 2005.
En este reparto, a España le ha tocado un 26%,
bastante cerca de la media. La lógica que parece haber seguido la
Comisión es exigir más a aquellos países con mayor renta per cápita y
exigir menos a los más pobres. Hasta aquí el reparto parece no tener
nada de malo o criticable. Sin embargo, la Fundación Renovables
considera que la propuesta para España es un objetivo de tan
fácil cumplimiento, tan laxo, que puede resultar perjudicial para su
desarrollo económico.
Como ya señaló el propio semanario The Economist en 2006 el que la UE
se comprometiera a reducir sus emisiones con el Protocolo de Kioto le
dio ventajas competitivas con respecto a Estados Unidos (de aquí la
fuerte presencia de empresas renovables de la UE, incluyendo españolas,
en EEUU) que no se ratificó y la Comisión volvió a insistir en ello al
proponer reducciones más estrictas para 2020. Los objetivos más
ambiciosos se traducen en innovación y competitividad (además de mejoras
ambientales) y los más laxos no.
El 26% de la reducción que se exige a España (desde sus niveles de
2005) casi se ha cumplido en la actualidad. En 2013 la reducción que se
había producido era superior al 21% por lo que, pese al aumento de
emisiones de los dos últimos años, significaría que Europa le pide a
España que reduzca en los próximos 15 años sus emisiones -para sectores
tan importantes como el transporte, los residuos, la agricultura y los
edificios- tan solo alrededor de un 5%.
Para la Fundación Renovables, teniendo en cuenta las
capacidades de España como país y la obligación y oportunidad
de descarbonizar su economía en el medio plazo, cumplir un objetivo tan
nimio significará que no se producirá innovación suficiente y que estamos perdiendo el carro del progreso.
Entendemos que en las discusiones de la UE se habrá tenido en cuenta
que gran parte de las reducciones se produjeron en España por motivo de
la crisis económica y que España tendrá que tener un futuro más
halagüeño en crecimiento económico y generación de empleo, lo que no
debería significar que el progreso sea en el sentido no deseable de más
energía y mas emisiones. Los objetivos marcados desde una Europa de dos
velocidades ambientales no van a empujar nuestra economía sino todo lo
contrario.
En este sentido, un ejemplo es el sector transporte, más
concretamente el del vehículo eléctrico, en el que estamos a la cola de
Europa. Si no revertimos este dato en el corto plazo, los productores
terminarán migrando a países donde se producen más matriculaciones de
vehículos electricos, perdiendo, además de una oportunidad de mejorar la
calidad del ambiente y de la vida urbana, un importante motor de
creación de empleo.
Desde la Fundación Renovables se señala también que
muchas soluciones ya están en marcha y llevarán a reducciones de
emisiones más importantes que las que exige este objetivo. Medidas como
los planes emprendidos desde los diferentes ayuntamientos de España para
reducir la contaminación, fundamentalmente por la obligación de mejorar
la salud de los ciudadanos o las políticas de urbanismo y movilidad que
reduzcan la necesidad de transporte, acerquen viviendas y puestos de
trabajo y mejoren la calidad de vida de todos.
En el sector residuos las mejoras deben ser también importantes. De
hecho, estamos obligados a reducir al 10% los residuos urbanos que van
al vertedero en 2030 y aumentar mucho los objetivos de reciclado y
preparación para reutilización por normativa europea. En un país que
está por encima del 50% en residuos a vertedero, cumplir con estos
objetivos, exigirá un cambio ambicioso e innovador del sector para
trasformar los residuos en recursos (incluyendo sistemas de depósito
para asegurar un mayor reciclado y de calidad y posibilitar la
reutilización) y entrar en una economía circular con menor consumo de
energía y materiales, con innovación a tope en un sector actualmente
atrasado.
La Fundación Renovables considera, así mismo, clave para nuestra economía el sector de la edificación. Sólo un 1% de los edificios en España cumple con la normativa más exigente en eficiencia energética
por lo que el margen de actuación es enorme. Tenemos un parque que hay
que remodelar de manera extensiva (la Comisión plantea como objetivo
2020 en su Hoja de Ruta 2050 para uso eficiente de recursos, el renovar
un 2% del parque edificado anualmente, ¡casi medio millón de edificios
al año en España)! y lo bueno es que reactivar el sector de un
modo sostenible fomentaría la creación de empleo precisamente en el
sector en el que más se ha perdido y para muchos años. ¿Por qué entonces la Comisión espera tan poco de nosotros para los próximos 15 años?
No se debe tratar de capacidad ni de necesidades sino de que la
Comisión, con sus políticas de austeridad, lleva cerrando el grifo a los
países del Sur durante años y ha impedido cualquier política de
expansión económica, aunque también pudiera ser porque esto es lo que
desea nuestro Gobierno en funciones y es lo que ha pedido a la Comisión,
como lo ha hecho Polonia, ya que ambos consideran la reducción de
emisiones gravosa para el modelo económico insostenible que se quiere
seguir propiciando.
La Fundación Renovables denuncia que menores
objetivos ambientales, a la larga, perpetúan la brecha, nos condenan.
Aquellos países con objetivos más ambiciosos ganarán la batalla de la
innovación mientras que los países en los que los objetivos políticos no
resulten un desafío, no generarán el tejido productivo de futuro para
una economía descarbonizada y estarán condenados a vivir peor Señores de la Comisión Europea, España no necesita que sean
poco exigentes con sus compromisos ambientales. Lo que este país
necesita son inversiones suficientes , eficientes y eficaces, justamente
para poder descarbonizar el transporte, la edificación, la agricultura y
los residuos como objetivo deseable en sí mismo a todos los efectos y
buenos para los españoles
El Plan Local Urbanístico de París fue presentado por su
alcaldesa, Anne Hidalgo, el pasado 4 de julio de 2016. En el ámbito
ambiental se recogen las disposiciones y apoyos dirigidos hacia una
movilidad más sostenible que conlleva el incentivo de supresión de
aparcamientos para coches y un uso de la bicicleta que pretende alcanzar
un 15% del total de los desplazamientos urbanos en 2030. En paralelo,
se ha desplegado un plan específico en materia de logística urbana
atendiendo a la logística de último kilómetro. Ambientalmente, destacar
el impulso de la vegetalización de los edificios –especialmente las
fachadas y cubiertas- y la reglamentación para el aumento de
laeficiencia energética y el desarrollo de la energía renovable de los
edificios y la creación de un estudio para cartografiar la biodiversidad
en París para acabar desarrollando una trama verde y azul para la
ciudad de las luces.
El nuevo Plan Local de Urbanismo (PLU de ahora en adelante) de París
presentado para su evaluación final quiere responder a los objetivos
políticos del mandato actual del Ayuntamiento de París, dirigido por la
alcaldesa Anne Hidalgo. Estos son los objetivos que se propusieron en el
ámbito ambiental:
Biodiversidad y naturaleza en la ciudad. Más allá de los
parques y jardines de la ciudad se quiere seguir desarrollando el riego
en la ciudad mediante la vegetalización y agricultura urbana en el
espacio público, las fachadas y las cubiertas.
Transición energética y adaptación del territorio al cambio climático.Se
propone, entre otras medidas, potenciar proyectos de alto rendimiento
ambiental, luchar contra los islotes de calor urbanos, reforzar la
eficacia energética de los edificios, más desarrollo de la
vegetalización de los inmuebles y el desarrollo de la producción de
energías renovables y de recuperación.
Calidad de vida, como, por ejemplo, la prioridad a
los transportes públicos y los desplazamientos activos así como la
creación de espacios logísticos urbanos para luchar contra la
contaminación atmosférica y los perjuicios ocasionados por los
desplazamientos motorizados que permitan mejorar la calidad de vida y la
salud de los parisinos.
Para la realización del nuevo PLU, se efectuó primero un diagnóstico
urbanísticode los 9 años de aplicación del antiguo PLU, que recabó la
siguiente información:
Se han realizado esfuerzos que han favorecido la sobriedad energética de los edificios.
Se han creado 46 nuevos jardines, grandes parques o extensiones de
jardinesexistentes, que representan cerca de 30 hectáreas en todo París.
Se han vegetalizado casi 45 cubiertas. Las normativas introducidas
en el artículo 13 del reglamento del PLU para la preservación y la
puesta en valor de espacios verdes privados, que participan en el
objetivo de conservación y refuerzo de la biodiversidad en París.
Un estudio de AirParif
de 2002-2012 demuestra que la reducción del tráfico rodado, la
potenciación de los transportes públicos (extensión de líneas de metro y
tranvía) y la circulación de transportes limpios (Vélib, Auto- y
Utilib´) han permitido alguna rebaja de contaminación atmosférica. Sin
embargo, el Ayuntamiento reconoce que queda mucho por hacer cuando
además existe una preocupación creciente por la contaminación
atmosférica, tal como lo indica el PADD (Plan d’aménagement et de développement durable: Plan de ordenación y desarrollo sostenible).
Certificación de 3 barrios de París como EcoBarrios en 3 operaciones
urbanísticas y una cuarta en proceso bajo la figura urbanística ZAC
(acrónimo de Zone d’Aménagement Concerté).
El PLU ha tenido en cuenta documentos de reglamento superior al suyo propio a la hora de elaborar su propuesta:
El Esquema General de coherencia ecológica (SRCE) de la Región Île-de-France
del 21 de octubre de 2013, que define las prioridadesen un plan de
acción estratégico e identifica los componentes de la trama verde y azul
(reservorios debiodiversidad, corredores ecológicos, cauces de agua y
canales, eliminación de los obstáculos para el funcionamiento de
continuidad ecológica)a tener en cuenta en el PLU.
El Plan clima-energía de París, del
11 de diciembre de 2012, que persigue una reducción de los efectos de
los gases invernadero en un 75% en 2050 respecto a los niveles de 2004.
A su vez, además de este PLU los próximos meses París también
participará en el proyecto metropolitano y los esquemas estratégicos
como el plan climático metropolitano o el esquema metropolitano de
coherencia territorial.
La nueva propuesta de PLU propone las siguientes medidas para
responder tanto al mandato del actual gobierno como a las orientaciones
de los documentos de rango superior: Biodiversidad y naturaleza en la ciudad
De acuerdo con el Esquema General de coherencia ecológica (SRCE), se
quiere desarrollar la elaboración de una trama verde y azul en París con
el fin de aumentar la circulación de especies vegetales y animales y
reforzar la biodiversidad en la ciudad.
Para ello se quiere realizar un diagnóstico del territorio que
determine el potencial de los reservorios y corredores urbanos de
biodiversidad de París, en el que se distingan la tipología de hábitats
propios de la ciudad, una lista de hábitats prioritarios, una lista de 6
sub-tramas y una lista de especies concretas a proteger.
Para poder cartografiar los “reservorios urbanos de biodiversidad”,
cualquier espacio superior a una hectárea será objeto de calificación.
Esto significa que sobre el territorio parisino existen un centenar de
lugares, municipales o no (como son espacios verdes públicos y privados,
cementerios, campos de deporte…)susceptibles de dicha calificación. La
calificación consiste en la evaluación de la capacidad de acogida de
biodiversidad sobre la base de distintos criterios (superficie, número
de subtramas, presencia de hábitats prioritarios, flujos de
frecuentación del lugar, iluminación, gestión ecológica, etc).
En una segunda parte, se identificarán los “corredores urbanos de
biodiversidad” que permiten la circulación de especies entre dos
reservorios (intra-muros o no) que, a su vez, serán calificados.
Así pues la trama verde y azul de París está en estos momentos en fase de elaboración.
Por otra parte, y mediante la ampliación del artículo 13 del PLU que
define las características que deben presentar los espacios libres y
plantaciones, se añade y clarifica la vegetalización de los edificios ya
edificados.
La modificación del PLU intensifica dispositivos en favor de la
ciudad “vegetalizada” y aumenta en un 10% los objetivos de revegetación
(en el suelo (terreno abierto), fachadas o cubiertas); incorpora la
posibilidad de una ligera retirada de alineación con el fin de poder
enraizar plantas trepadoras y vegetalización de cubiertas de más de
100m2 en lugar de 200m2 como hasta ahora para los edificios
ya construidos y la obligatoriedad de vegetalizar las cubiertas de
superficies superiores a 200m2 de las nuevas construcciones o nuevas sobreelevaciones de los edificios ya existentes.
Además, se añaden dos disposiciones para fomentar la agricultura
urbana. Los espacios destinados a tales efectos se contabilizarán, a
partir de ahora, como zonas verdes, invernaderos y sistemas de
producción agrícola y se autorizarán a realizar tanto en suelo como en
cubiertas de los edificios. Medias en favor de una “movilidad suave”
En materia de movilidad se implantan normativas que consideran la
baja continua de las tasas de motorización de los hogares parisinos, el
sobredimensionamiento de los parques de estacionamiento de los sectores
periféricos revelados en abundancia de plazas desocupadas, la progresión
de la bicicleta , el despliegue de servicios de coche compartido y el
desarrollo de transportes públicos. En este sentido, destacan los
objetivos del ayuntamiento en disuadir el estacionamiento del automóvil
en los centros de trabajo y la reducción de la contaminación
atmosférica.
En este sentido, la principal medida adoptada ha sido la eliminación
de la obligación de construir estacionamientos para los programas de
vivienda y el establecimiento de normas máximas (y ya no mínimas) de
aparcamientos para oficinas.
Al mismo tiempo, se promoverá el aparcamiento de bicicletas: se le
dedicará un 3% del suelo edificable, contra el 2,25% del PLU anterior.
El nuevo PLU dará más flexibilidad en su implantación, a favor del
estacionamiento a nivel. Estos objetivos se correlacionan con los
adoptados en el Programa de desarrollo del uso de la bicicleta para el
periodo 2015-2020 adoptado en 2015, el denominado “Plan Vélo” para el
que se destinan 150 millones de Euros y que pueden descargar en este enlace.
Los objetivos de este Plan son ambiciosos:
Que el 15% del total de los desplazamientos efectuados París se
realicen en bicicleta en 2020, cuando en 2015 representaba solo el 3%.
De este 3% solo el 8% son trayectos del domicilio al trabajo. Así, pues,
se pretende multiplicar por cinco la presencia de la bicicleta en
París.
Pasar de 700 a 1400 km de vías para los ciclistas.
Se toman medidas de facilitación del uso de la bicicleta, como la
creación de una red principal continua y homogénea, la Red Exprés
Bicicleta,organizada según los ejes Norte-sur y este-oeste así como en
las vías de circunvalación de la ciudad. Se crean señales de
ceda-el-paso específicos en las intersecciones de estos dos grandes ejes
de la ciudad. Además se contempla la creación de vías de doble sentido
para las bicicletas para calles de sentido único.
Se crearán 10.000 nuevas plazas de aparcamiento para bicicletas con
servicios de intermodalidad. Es decir, aparcamientos que serán
estudiados con el fin de ofrecer un servicio adicional a los ciclistas
de París cerca de sus áreas de trabajo, residencia, actividad y ocio.
Logística urbana
El desarrollo del comercio electrónico y entrega a domicilio, supone
una alteración en las formas de entrega al cliente final. Es lo que se
conoce como logística del último kilómetro o de la última milla. La
multiplicación del transporte a domicilio supone más traslados
específicos cuando no una logística inversa (por ejemplo, en caso de
devolución de entrega), lo que se acompaña de más contaminación, más
ruidos, más desplazamientos rodados por la ciudad.
Para ello, se prevén puntos de penetración de mercancías de
diferentes medidas, basadas en el uso de contenedores móviles que
permitan la conexión entre medios de transporte masificados y vehículos
adaptados a la entrega final.
Para abordar estos cambios, el Ayuntamiento ha creado una nueva
categoría de Construcciones e instalaciones necesariaspara servicios
públicos o de interés colectivo(CINASPIC), los Espacios Logísticos
Urbanos (ELU). Esta clasificación ha permitido establecer una red de
unos sesenta perímetros de localización “ELU”. A partir de estos “ELU”,
las entregas de mercancías a clientes finales podrán realizarse a pie,
en bicicleta, en scooter eléctrico… en definitiva, centros logísticos
donde se realice la ruptura de carga que permita una mejora ambiental y
en la eficiencia de los últimos desplazamientos para la entrega final a
clientes.
Por otra parte, el municipio ha cambiado la norma para poder excavar
en el corazón de parcelas y desarrollar, de este modo, las superficies
de logística mediante la reutilización de los sótanos existentes. El
Ayuntamiento entiende que con la reducción del coche en la ciudad, se
acabará teniendo un superávit de estacionamientos. Puesto que muchos de
ellos se encuentran en el sótano con una altura relativamente baja de
techo, se debe poder excavar y proporcionar acceso a la luz del día, y
de este modo ganar nuevos espacios.
Esta posibilidad de optimizar la función de locales existentes, a
veces infrautilizados o incluso degradados, para actividades de interés
general como son la logística urbana y la gestión de los residuos,
constituye una alternativa a la construcción sistémica de nuevas
instalaciones que podrían dar lugar a impactos ambientales, y, por lo
tanto, al consumo de espacio. En este sentido, se introduce en el
reglamento el artículo UV.2.1 referido a locales de sótano existentes y a
los que se autoriza el cambio de uso para la acogida de actividades
ligadas a la entrega y recogida de mercancía y gestión de residuos. Medidas para las mejoras energéticas y ambientales de las construcciones
Se aplica la igualdad territorial para la realización de obras de
ahorro del consumo energético, reducción de efectos de gases invernadero
y el desarrollo de energías renovables. La normativa ambiental se
aplica mediante el artículo 15 del reglamento del PLU y en él se
establecen objetivos específicos en las nuevas construcciones difusas y
eleva los requisitos ambientales para las ZAC (Zone d’Aménagement Concerté).
Las ZAC son operaciones de iniciativa pública para la planificación
urbanística sobre un terreno. Las ZAC pueden ser iniciativadel Estado,
una administración regional, municipal o un ente públicoen la que se
proyecta una iniciativa que implica una modificación urbanística. Se
entraentonces en un proceso de estudio y diagnóstico de las necesidades
de los futuros habitantes y usos que se prevén llevar a cabo en el que
también intervienen los habitantes, asociaciones locales y otras
personas interesadas en el marco de la concertación y la organización de
reuniones públicas. El promotor público debe crear un informe de
creación de la ZAC que incluirá la viabilidad técnica, económica y
financiera así como las cuestiones ambientales como son el tratamiento
de aguas pluviales, recogida de residuos, mejoras energéticas y el
rendimiento ambiental de los edificios. Finalmente, se presenta el
procedimiento elegido para su realización. Se aprueba entonces por el
consejo municipal o comunal.
Respecto a las aguas pluviales destacan la introducción de
disposiciones que favorecen la retención y reutilización de aguas
pluviales para mejorar la gestión del agua, técnicas alternativas de
control de aguas pluviales para limitar los aportes de aguas pluviales
en las redes y la lucha contra la impermeabilización de los suelos y
medidasque favorezcan el reciclaje de aguas pluviales.
En cuanto a la gestión de residuos, destaca una disposición que
favorece la instalación de compostadores en espacios vegetalizados para
incentivar el reciclaje de los residuos orgánicos. Con ello se deben
promover disposiciones en favor del acondicionamiento de espacios para
el almacenamiento de residuos para la recogida selectiva y la
recuperación para la reutilización.
Finalmente, en cuanto a las disposiciones relativas a las
características térmicas y energéticas de las construcciones y los
materiales, las nuevas propuestas reglamentarias buscan:
El enfriamiento de los edificios con el fin de rebajar el efecto
islote de calor urbano característico del territorio parisino y
garantizar el confort en verano de sus ocupantes.
Hacer “respirar” mejor las fachadas de los edificios mediante
aislamiento de los materiales de construcción, con el fin de permitir a
la humedad interior que sea naturalmente evacuada y mantener la
salubridad de los edificios.
Mejorar la eficacia energética del parque inmobiliario de París a
largo plazo mediante la disminución del consumo energético y gracias a
la producción de energía renovable.
Para ello destaca la disposición, tanto para construcciones
existentes como para las nuevas, de la obligatoriedad de instalación de
dispositivos de ahorro energético, salvo excepciones tales como de
carácter técnico o de preservación de patrimonio.
También subrayar que, para proyectos de construcción nueva y
rehabilitación que implique la realización de obras mayores de edificios
existentes en que la superficie de suelo sea superior a 1500m2,
debe acompañarse de instalaciones de energía renovable. Este lindar
también contempla que las cubiertas sean vegetalizadas cuando no estén
ocupadas por otros dispositivos de ahorro energético o de producción de
energía renovable. Las excepciones también se aplican en este caso sobre
todo cuando se trata de la protección del patrimonio arquitectónico y
el paisaje urbano.
El rendimiento energético y ambiental pasa también por la elección de
los materiales utilizados, sobre todo para la limpieza y las obras de
los edificios existentes, por lo que se recomienda el uso de materiales
de origen biológico, materiales naturales (es decir, aquellos no
fabricados por la acción del hombre), renovables (que puedan explotarse
sin que sus reservas se agoten) o reciclables. Gestión de residuos:
El PLU también contempla un ambicioso plan de gestión de residuos de
proximidad actualmente en desarrollo. Tal y como lo prevén las
orientaciones del PADD, es necesario que París implemente una densa red
de puntos de aportación voluntaria de residuos, asociados a dispositivos
de puntos limpios. Un esquema director de residuos de proximidad está
en proceso de elaboración a estos efectos.
El PLU debe contribuir, sobre todo por la vía normativa, a poner en
marcha esta ambiciosa acción. Al respecto, las disposiciones normativas
relativas a la gestión de los residuos son objeto de adaptaciones
análogas a aquellas que fueron descritas en lo concerniente a la
logística urbana. Así, la lista de las CINASPIC se completa con un ítem
que designa “las construcciones e instalaciones dedicadas a la recogida,
a la recogida separada, a la preparación en vistas de la reutilización,
incluyendo la venta de productos que resulten de ellas, o del
tratamiento de residuos (reciclaje, clasificación, compostaje,
eliminación…)”. Del mismo modo, la modificación del artículo UV.2.1.,
mencionado anteriormente, también concierne a la gestión de residuos. En
efecto, como los equipamientos de logística urbana, los espacios
dedicados a la gestión de residuos serán admitidos en los sótanos de
locales existentes en la zona UV, cuando su capacidad y características
lo permitan.
Pueden consultar la presentación completa del nuevo PLU en este enlace.
Con el paso de los años corremos el riesgo de naturalizar y normalizar situaciones que nunca lo son. Si en 2005 se acuña el neologismo“mileurista” para denunciar la realidad de toda una generación, hoy, en 2016, esa misma cifra incluso cuando el dinero vale menos, ya no se utiliza como una forma de calibrar la precariedad salarial. Hoy nuestro baremo es más servil y se contenta cada vez más con menos. Algo parecido sucede con el empleo cuando atendemos a sus entresijos y nos adentramos en la maraña de relaciones de dominio y dependencia, que mezclan un retorno feudal con el contrato emocional propio de la empresa contemporánea. Si hablamos de empleo no podemos referirnos a cualquier modalidad de contratación, pues empleo no es sinónimo de trabajo, ha sido más bien una manera históricamente concreta de entender el trabajo.
Si por empleo entendemos un trabajo estable, indefinido, que permite programar en el tiempo la vida y está asociado a ciertos derechos junto con capacidad de consumo, lo que nos encontramos hoy en “la lucha contra el paro”, no es empleo. Cuando los contratos de un día han crecido un 102% desde 2008 y el 77% de los nuevos empleos “creados” en 2015 fueron temporales. Cuando más de la mitad de quienes se encuentran en riesgo de exclusión social no salen de esa situación a pesar de encontrar un trabajo. Cuando se dispara en un 350% la cifra de becarios que suplen un trabajo pagado por otro que muchas veces es gratuito, cuando el fraude de ley se hace norma y autónomo quiere decir heterónomo, la sociedad articulada en base al empleo, se resiente. Según indica el “Índice de calidad en el empleo” de la OCDE, España ocupa el penúltimo lugar de 34 países. Desde 2012 hemos descendido 10 posiciones.
Gracias a las reformas laborales, no solo el trabajo calificado de precario deja de ser empleo, incluso el empleo indefinido significa otra cosa distinta desde el momento en el que se abarata el despido, se erosionan las condiciones laborales y se reducen los sueldos. Ante semejante zócalo lo importante no son únicamente los números, las estadísticas, números que por otro lado, indican que desde la entrada de Rajoy en el gobierno hasta la EPA del III trimestre de 2016, hoy hay 123.000 personas ocupadas menos. Las salidas que nos ofrecen pasan o por dedicar tu vida y alma a conseguir sacar un proyecto adelante, endeudarte, sacrificarte, “trabajar cada vez más, disfrutar menos”, o si no eres capaz de perseguir tus sueños con tenacidad, endeudarte más, ganar menos y asumir la precariedad y el paro crónico como norma.
¿Cómo es posible que haya tanta escasez en medio de tanta abundancia? El “capitalismo popular” pregonado por Thatcher en donde cada vez más gente se hacía propietaria, se ha resuelto como una gran estafa. No es una sociedad de propietarios, es una sociedad de hipotecados y de precarios, una fábrica de personas endeudadas que ven laminada su libertad y sus esperanzas. El señuelo según el cual la salida del proletariado era hacerse propietario, ha servido para convertir a la vivienda, la educación, o la sanidad, en un acceso privado, en una deuda permanente. Tenemos que invertir a Thatcher, hace falta más sociedad, más tejido, más encuentro, más instituciones que frenen la tormenta desatada por las finanzas contra la libertad.
La sucesión de mentiras del PP solo han producido un descontrol en las cuentas. Primero decían que no había desviación del déficit sabiendo que no era cierto. Pero el problema nunca ha sido cumplir o no a rajatabla con un dogma como el del déficit, sino el uso que se ha hecho de su incumplimiento. En lugar de invertir en modernizar el país hicieron una reforma fiscal regresiva que ha provocado una fosa de 8.000 millones de euros.
Lo mismo sucede con el adelanto del impuesto de sociedades -una chapuza que no enfrenta la reforma fiscal necesaria-, pues la discusión no se dirime entre si se está o no en desacuerdo con esta medida, importa sobre todo el para qué se aplica esta medida. Son 6.000 millones de euros que no se destinarán a invertir en necesidades sociales, en mejorar la economía popular, sino en tratar de llenar ese pozo llamado déficit. La disciplina presupuestaria no tiene una justificación económica, porque el problema no está en la contención del gasto sino en la insuficiencia del ingreso. El dogma del déficit es un elemento de control político que garantiza la subalternidad de los pueblos y sus necesidades a las finanzas.
Lo importante, y esto es crucial para pensar en salidas democráticas, eficaces, innovadoras y transformadoras de la crisis, pasa por entender que si el trabajo ya no es empleo, entonces toca hacer un nuevo puzzle social para garantizar la dignidad general. La OCDE indica que entre 1990 y 2012, los países donde más han descendido las horas de trabajo resultan ser más productivos. Eso no implica una causalidad total, influyen también la formación, la inversión en capital fijo y el tipo de tejido productivo, pero marca una tendencia. Se trata de prioridades. En España se sube la edad de jubilación -Merkel la bajó en Alemania a los 63 años- al tiempo que se impide entrar en el mercado laboral a la juventud, y para cuando entra lo hace en condiciones muy precarias.
¿No sería más racional subir la calidad de vida en lugar de la edad de jubilación? Vivir mejor, más natalidad y trabajar menos -trabajamos 280 horas más al año de media que en Alemania-. La calidad de vida debe venir por el ingreso garantizado y no solo por el empleo remunerado, dicho de otro modo, para asegurar la calidad de vida hay que garantizar ingresos y derechos al margen de tener un empleo. El sindicato más grande del Reino Unido adopta como propia la demanda de una renta básica universal, lo cual supone ya una renovación de la proyección sociopolítica del sindicato, dado que se asume como terreno de conflicto a la vida en su conjunto y no solo dentro del centro de trabajo. Hay que trabajar por trabajar menos horas y hacer otro uso del tiempo, hay que poner racionalidad en las inversiones buscando aquello que genera sinergias y cuyos efectos mejoran la calidad de vida en lugar de empeorarla.
Por cada euro invertido en educación física se ahorran 4 en sanidad. Por cada euro invertido en el asesoramiento dietético en la sanidad la sociedad recibe a cambio un neto de entre 14 y 63 euros. Por cada euro que se invierte en un área protegida se obtienen 80 de beneficio, pues sale más barato mantener la biodiversidad que arrasarla y luego tratar de imitar su efecto. Por cada euro invertido en apoyar la bicicleta se multiplica por 9 euros su retorno a la sociedad. Invertir en infraestructura para la bicicleta y los peatones crea más empleo que las infraestructuras viarias. Para todo esto hace falta dinero, para que haya dinero hay que subir el suelo adquisitivo de la sociedad, hay que generar más ingresos de manera más justa e invertirlo con una finalidad de mejora colectiva priorizando a la economía local. Vivir mejor y sufrir menos. Esa es la máxima a seguir para construir un país en donde el aumento de la libertad sea inversamente proporcional a las hipotecas y las deudas contraídas.
En muchos países, especialmente los menos ricos, la tierra se vuelve más árida, avanzan los desiertos, el ganado muere y los recursos hídricos disminuyen o se contaminan.
Según los demógrafos, en pocos años, las actuales olas migratorias
hacia Europa nos parecerán más bien modestas, en comparación con lo que
nos depara el futuro.
En 2014, el Internal Displacement Monitoring Center
(IDMC), del Norwegian Refugee Council, estimó en 19,3 millones de
personas huyeron de sus hogares debido a catástrofes medioambientales. Los migrantes seguirán huyendo de guerras y crisis económicas, pero la razón principal de estos desastres será el cambio climático.
En 2010, una ola de calor y una sequía extraordinarias golpearon
Rusia y Ucrania. Las cosechas de trigo se redujeron un 33% en Rusia y un
18% en Ucrania. Los dos países, entre los mayores productores de trigo
del mundo, prohibieron o redujeron drásticamente las exportaciones.
El precio del trigo se duplicó en pocos meses, azotando
en particular a los países de Oriente Medio y Norte de África. En enero
de 2011 los manifestantes que en Túnez inauguraron las Primaveras
Árabes, salieron a la calle agitando barras de pan.
Siria ha experimentado su peor sequía entre 2006 y 2011. La mayor
parte del ganado murió y unos dos millones de personas abandonaron el
campo para inundar las ciudades, sin trabajo. El agua se volvió un bien
escaso y de difícil acceso. Las protestas fueron reprimidas con
violencia, abriendo camino a la guerra civil, por la que la población
siria está abandonando el país.
Jos Lelieveld, director del Instituto Max Planck de Química
(Alemania), ha estudiado la posible evolución de las temperaturas en el
cuadrante de Oriente Medio hasta 2100: ya en el verano de 2050, por la
noche el termómetro no bajará de los 30° y al mediodía se fundirá a 46°,
tocando los 50° a final de siglo.
Responsabilidad desigual
Las consecuencias del cambio climático son proporcionalmente mucho
mayores para los países que poco o nada han contribuido a las emisiones
de gases de efecto invernadero
Amplias áreas de Oriente Medio y Norte de África serán
inhabitables y muchas de las 500 millones de personas que allí viven,
podrían verse obligadas a emigrar. Las guerras del futuro serán por el agua
Cada año en África se producen millones de muertes por sed, junto con
muchas otras relacionadas con la falta de agua potable. Según una
opinión muy compartida, las guerras del futuro, después de oro y
petróleo, serán combatidas por el control de los recursos hídricos.
El lago Chad, frontera natural entre Níger, Nigeria, Camerún y
Chad, en medio siglo ha perdido cerca del 85% de su superficie, un drama
para las más de veinte y dos millones de personas que viven en su
cuenca. La sequía, las hambrunas y epidemias golpean también en
Mauritania, Mali y Somalia, causando un éxodo incesante hacia los
campamentos de refugiados y, para los más atrevidos y desesperados,
hacia la ilusión de una nueva vida en Europa.
Otras áreas del mundo podrían convertirse en puntos de partida para
nuevas ondas de migración. El desierto de Gobi avanza unos 10.000 km2 al
año, amenazando a Mongolia y a las regiones de Ningxia y Gansu, en
China. Lo mismo ocurre en Alaska y Groenlandia, donde la perdida de
hielo causa estragos en las actividades de caza y pesca de los nativos,
empujándoles a abandonar sus hogares.
El refugiado climático no está legalmente reconocido
La ONU
estima que en la actualidad más del 60% de las emigraciones que se
producen en el planeta se dan por huracanes, inundaciones o sequías y
que serán 250 millones los refugiados climáticos dentro de 2050. La Oxford University también alerta del problema. Otros estudios, citados por la BBC, dejan la cifra en 200 millones.
Pese la certeza del drama y la alarma mundial, el estatus jurídico de refugiado climático no existe.
Paula San Pedro, de la ONG Oxfam Intermón, aclara que, “nosotros no
les llamamos refugiados climáticos, porque es un concepto que no está
presente en la Convención de Ginebra de 1951 y, por lo tanto, no
tendrían derecho a la protección internacional; además, es muy difícil
aclarar la condición de migrante climático, a menos que no sea un caso
muy ejemplar como el de las islas del Pacífico”.
La primera petición de asilo de un refugiado climático
En 2013 causó un gran revuelo la solicitud de asilo por razones climáticas formulada a Nueva Zelanda por un ciudadano de Kiribati,
un pequeño Estado del Pacífico formado por 33 islas en las que viven
103.000 habitantes en grave peligro por la subida de las aguas. La
solicitud fue rechazada porque el requisito internacional para obtener
la condición de refugiado no contiene motivos medioambientales.
Para solucionar esta situación, los representantes de 75 estados se
reunieron en Ginebra los días 12 y 13 del pasado octubre en el marco de
una conferencia mundial donde se presentó una propuesta de agenda de protección de los refugiados climáticos y
víctimas de desastres naturales. La iniciativa es el resultado de las
consultas regionales llevadas a cabo por la Nansen Initiative, un
organismo creado por Suiza y Noruega en 2012.
Uno de los riesgos de obviar el problema medioambiental
Debemos considerar que las consecuencias del cambio climático son
proporcionalmente mucho mayores para los países que poco o nada han
contribuido a las emisiones de gases de efecto invernadero y que no tienen los recursos para adaptarse.
El diplomático británico Crispin Tickell, en 2007 ya avisaba de que
“aquellos que tienen escasez de comida, agua y que no pueden desplazarse
a países donde parece que todo es maravilloso, van a adoptar medidas desesperadas para tratar de conseguir sus objetivos. Debemos aceptar que la violencia entre comunidades y entre las naciones podría incrementarse”.
La mejora ambiental del entorno provoca una revalorización de las viviendas que termina por expulsar a las clases más vulnerables.
La investigadora ha realizado un estudio piloto sobre la "gentrificación verde" en la ciudad de Barcelona. / DANNY NAVARRO
SINC
Las ciudades que crean o restauran bienes o infraestructuras verdes contribuyen a medio y largo plazo a la exclusión de colectivos sociales más vulnerables. Así se desprende de un estudio realizado por un equipo de investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona (ICTA-UAB) liderado por Isabelle Anguelovski.
La socióloga y geógrafa ha analizado cómo el perfil socioeconómico de los vecinos varía significativamente cuando su zona de residencia experimenta un proceso de “reverdecimiento” con la creación de parques, áreas verdes, o corredores ecológicos.
Los procesos por los cuales las ciudades potencian la construcción y recuperación de espacios naturales no benefician a todos los ciudadanos por igual
El estudio pone de manifiesto que los procesos por los cuales las ciudades potencian la construcción y recuperación de espacios naturales no benefician a todos los ciudadanos por igual. Se trata del proceso denominado como “gentrificación verde” por el que la población original de un barrio de clase media-baja o baja es desplazada por nuevos habitantes con mayor poder adquisitivo que llegan a la zona atraídos por la proximidad de nuevos parques y zonas verdes y por la oferta concurrente de viviendas mas atractivas.
Como consecuencia, el precio del alquiler y de venta de las viviendas experimenta un incremento considerable, de manera que los colectivos más vulnerables no pueden hacer frente a los precios y tienen que acabar marchándose a vivir a otras zonas, menos atractivas y con una calidad de vida más baja.
“Nuestra hipótesis es que las ciudades más verdes se vuelven más desigualitarias e injustas”, explica Anguelovski, coordinadora de un proyecto científico que pretende profundizar sobre este tema y evaluar el impacto social que provoca la introducción de la naturaleza en los barrios.
“Hay que mejorar la calidad ambiental de los barrios, verdificarlos, pero no a cualquier precio”, comenta la experta quien incide en la necesidad de que este tipo de procesos se acompañe de políticas que controlen la especulación inmobiliaria en la zona, promuevan las promociones de vivienda social, limiten las licencias de alquiler de corto plazo o fomenten la creación de redes de apoyo entre los vecinos y entre comercios locales.
Para la realización de su proyecto Greenlulus (Green Locally Unwanted Land Uses, en inglés), Anguelovski ha recibido una subvención de 1,5 millones de euros de la Unión Europea (Starting Grant del European Research Council). Durante los próximos cinco años, un amplio equipo coordinado por Anguelovski comparará la situación de 20 ciudades de Europa y otras 20 de Estados Unidos, con el objetivo de elaborar un ranking de las urbes ambientalmente más justas así como su impacto social y en la salud de los residentes.
Estudio piloto en Barcelona
Este proyecto cuenta ya con un estudio piloto realizado en la ciudad de Barcelona que evidencia la “gentrificación verde”. El estudio Evaluando los impactos de la gentrificación ambiental en los barrios históricamente vulnerables de Barcelona analizó cómo ha variado el perfil socioeconómico de las personas residentes junto a 18 parques y jardines creados en Barcelona entre 1992 y principios de la década del 2000, en Sant Andreu, Sant Martí, Nou Barris, Ciutat Vella y Horta-Guinardó.
Los resultados muestran cómo en algunos barrios, la mejora ambiental del entorno ha provocado una revalorización de las viviendas que ha terminado por expulsar a las clases más vulnerables para dejar paso a ciudadanos con rentas más altas.
En Barcelona, la mejora ambiental del entorno ha provocado una revalorización de las viviendas que ha terminado por expulsar a las clases más vulnerables
El estudio utiliza seis indicadores: inquilinos con título universitario; inmigrantes no comunitarios, inmigrantes procedentes de países del Norte; residentes mayores de 65 años solos; incremento de la renta de los habitantes y el valor de la vivienda. Los investigadores consideran que se produce “gentrificación verde” cuando se detectan tres de estos parámetros de forma simultánea. Así sucede en los parques de Poblenou y Nova Icària, ambos en Sant Martí, y en los jardines Príncep de Girona, en Horta.
Este fenómeno se nota de manera extraordinaria en la zona próxima al parque de Poblenou, donde los vecinos con un mínimo de una licenciatura que viven a menos de 100 metros de la zona verde han aumentado en un 689% frente al 139% de la media de Sant Martí. El incremento también fue significativo en los parques de las Cascades, Port Olímpic, Nova Icària y Carles I.
Los ingresos de las familias que residen en zonas cercanas a los parques crecieron considerablemente (20,5% en Poblenou) y la presencia de extranjeros de países del norte se disparó en algunos casos hasta el 3.791% en los alrededores del parque de Poblenou, frente al 228% de todo el conjunto de Sant Martí, mientras que la cifra de extranjeros procedentes de países del sur descendió.
Por el contrario, en otras barriadas más estigmatizadas de Nou Barris o de Sant Andreu donde no se ha producido “verdificación” se ha incrementado el porcentaje de familias de colectivos más vulnerables, con la hipótesis de que proceden de los barrios que se han aburguesado como consecuencia de las mejoras ambientales.
Si bien estas zonas se benefician de nuevos espacios verdes, algunas son también zonas donde sigue faltando dinamizar el tejido comercial local, mejorar la calidad de las escuelas, y crear nuevos motores de actividad económica para los vecinos más vulnerables.